Esa es una pregunta que quizás no nos hemos hecho aún, pero es conveniente tener en cuenta que la posibilidad de perder nuestros datos y archivos está siempre latente, ya sea en un disco duro interno, en un disco duro externo o en cualquier tipo de soporte de almacenamiento, puede suceder tanto por errores humanos, por catástrofes climáticas o por fallas lógicas o estructurales en dichos soportes; pero lo cierto es que cualquiera sea la causa, esta pérdida puede llegar a dejar consecuencias difíciles de sobrellevar en una empresa sobre todo.
Siempre debemos prever una posible pérdida de datos, una sobreescritura o cualquier tipo de falla en el disco si los datos que allí tenemos almacenados son importantes o relevantes, por esto es total y completamente necesario realizar una o varias copias de seguridad y tener previsto, en caso de que esto no funcione, cuáles serán los especialistas en recuperación de datos que te sacarán de este desastre, ya hablaremos de eso pero primero nos enfocaremos nuevamente en las copias de seguridad.
Hemos hablado de distintos soportes de almacenamiento que pueden utilizarse para realizar una copia de seguridad, sabemos que un pendrive no es una opción muy segura aunque con el gran avance de la tecnología estos dispositivos ofrecen casi las mismas cualidades que un disco duro externo inclusive en cuestiones de cantidad de espacio para almacenar. Si pasamos a los discos duros externos, también son una opción confortable cuando se trata de información que quizás tenemos que trasladar de un lado a otro e incluso se puede asegurar la información de personas ajenas a la misma con un sistema de cifrado o encriptación, debemos tener en cuenta que cualquiera estas dos opciones son propensas a dañarse si reciben un golpe o una caída, un derrame de líquido, etc. Luego si los datos son en grandes cantidades y no son archivos a los que accedemos diariamente, las cintas magnéticas son una opción que se agrega a este tipo de almacenaje de seguridad ya que existe una gran cantidad de opciones en el mercado y con gran espacio de almacenamiento, este tipo de soporte es a veces calificado como “anticuado” pero es uno de los más seguros si de copias de seguridad hablamos. Y también existe por supuesto la “nube”, un almacenamiento en línea que quizás no es tan seguro como pensamos, si tenemos en cuenta que los proveedores de las “nubes” no prevén la pérdida de datos por errores humanos, es decir, si eliminamos un dato relevante de nuestro ordenador y vaciamos la papelera del mismo, esto es automáticamente sincronizado en la “nube” y perderemos este dato o archivo, si esto sucede, la mayor parte de los proveedores ofrecen solo 30 días para poder reparar este error, es un tiempo bastante reducido si tenemos en cuenta que difícilmente tomemos conciencia de nuestro error con tanta inmediatez; otro de los aspectos a tener en cuenta que no tienen en cuenta estos proveedores es que si en nuestro disco duro existe un daño, que no siempre es visible, este mismo error o daño se trasladará a la copia de seguridad en línea y por ende se corromperá, además tenemos que tener en cuenta que si mantenemos una red de los dispositivos conectada con la “nube” es posible que por algún tipo de error haya información que caiga en manos equivocadas o que uno de los usuarios de estos dispositivos elimine por error ciertos datos o archivos y así se eliminarán de la copia de seguridad; por estos motivos siempre lo más conveniente es tener resguardada una copia de seguridad extra en un dispositivo de almacenamiento externo al ordenador.
En el caso de que las copias de seguridad fueran corrompidas, hubiésemos olvidado realizarlas o no hubiéramos previsto este desastre, la mejor y única opción es acudir a especialistas que se encarguen de recuperar datos perdidos, para esto debemos tomarnos el tiempo de observar los comentarios positivos que recibe dicha empresa, que utilicen la tecnología adecuada para este tipo de trabajo, que ofrezca garantías de una correcta recuperación de los datos y por supuesto un acuerdo de confidencialidad que es lo principal a la hora de entregar nuestros datos a personas ajenas a ellos.
Como dijimos al principio, nadie está exento de la pérdida de datos, y no depende de la calidad de los discos duros (no en todos los casos), simplemente hay que entender que las fallas ocurren y que es mejor estar preparados para evitar que este desastre perjudique negocios, empresas o incluso el entorno de cada persona. Claro que con ciertos cuidados como la desfragmentación del disco, el correcto uso y la concientización de este tipo de desgracia podemos intentar evitar que esto suceda pero mejor es estar seguros de saber qué hacer en estos casos.
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